Ventajas de los jabones artesanales frente a los jabones industriales

A diferencia de los jabones industriales, que cuentan con muchos componentes sintéticos, los jabones artesanales se elaboran con ingredientes naturales. Por ello, además de no deteriorar nuestra piel, le aportan muchas propiedades.

Los jabones artesanales ofrecen muchas ventajas frente a los industriales. Además de limpiar la piel la hidratan, conservando todas las propiedades de sus ingredientes; sin emplear elementos sintéticos y respetando el medio ambiente.

Elaboración manual y laboriosa

El proceso de elaboración de los jabones artesanales es manual y laborioso.

Los Jabones de Montse se elaboran con aceites y mantecas vegetales de primera calidad. Además, contienen macerados y aceites esenciales de plantas aromáticas y medicinales, que aportan muchas propiedades para la piel.

La materia prima que utilizamos es estrictamente seleccionada y sometida a un proceso de control de calidad. Garantizamos así que los productos cumplan con los estándares establecidos por las normas de seguridad e higiene y con las expectativas u objetivos para los cuales fueron elaborados.

Para ello, de manera previa a la comercialización, realizamos un riguroso control de calidad de los lotes y de su trazabilidad. Sometemos a los jabones a un análisis de laboratorio que garantiza el cumplimiento de las condiciones óptimas para su comercialización.

Cada tipo de jabón está formulado de forma minuciosa para conseguir unas propiedades o características concretas. Limpieza, hidratación, protección para la piel, cremosidad y formación de espuma, dureza, olor… Todo este esfuerzo se ve recompensado con la satisfacción que les aporta a nuestros clientes el uso y disfrute de nuestros jabones artesanales.

Podéis ampliar toda la información del proceso de elaboración en este enlace.

Jabones artesanales para hidratar tu piel

El jabón se obtiene de la unión de ácidos grasos (aceites y mantecas) con una base o álcali, el hidróxido sódico. Éste último, después del proceso de saponificación y del curado, desaparece. En dicha unión, se produce una reacción química denominada saponificación, obteniendo como resultado las moléculas de jabón y glicerina.

En los jabones industriales, la glicerina es extraída para venderla a empresas que elaboran productos de cosmética, como pueden ser por ejemplo las cremas hidratantes. Por ello, un jabón comercial limpia, pero no hidrata, a diferencia de los jabones artesanales, que limpian e hidratan al mismo tiempo.

Los Jabones de Montse están formulados con un sobreengrasado que además de saponificar todo el hidróxido sódico empleado, aporta un extra de hidratación muy conveniente para mantener la piel sana y tersa.

Mantienen intactas las propiedades

En la elaboración de los jabones artesanales con proceso de saponificación en frío, los aceites y mantecas únicamente se calientan hasta unos 40ºC. Gracias a esto, las propiedades de los diferentes ingredientes se mantienen intactas, aportando muchos beneficios para la piel.

Por el contrario, en la elaboración industrial se someten a altas temperaturas, por lo que los ingredientes pierden muchas de sus propiedades.

Hay que tener en cuenta que algunos jabones que se venden en formato sólido y con apariencia artesanal, también han podido sufrir un proceso industrial. De hecho, en algunos casos también se les extrae la glicerina para comercializarla y son sometidos a altas temperaturas en su proceso de elaboración.

No contienen ingredientes sintéticos

La industria del jabón emplea productos sintéticos, sulfatos, siliconas, surfactantes para generar espuma, conservantes… Por el contrario, los jabones elaborados de forma artesanal no contienen estos ingredientes, con los beneficios que ello supone para la piel y para el medio ambiente.

Jabones artesanales, respetuosos con el medio ambiente

Otra de las grandes ventajas de los jabones artesanales es que son más respetuosos con el medio ambiente.

Al ser jabones en formato sólido, ofrecen la ventaja que se eliminan los plásticos frente a los jabones industriales comercializados en formato gel. Esto aporta importantes beneficios para el medio ambiente. Hay que tener en cuenta que, mejor que reciclar, es que directamente este plástico no exista.